Cuando estamos decididos a llevar una vida saludable y pensamos en nuestra alimentación, el coco es uno de los nutrientes que no debe de faltar en el menú.
El coco es una fruta que contiene una serie de vitaminas y minerales, aceites esenciales para el funcionamiento del cuerpo y, además, de su planta se extraen otros materiales útiles tanto casera como industrialmente. Sin embargo, los cardiólogos nos previenen de no abusar. ¿Por qué? Te lo explicamos a continuación.
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¿Qué es realmente el coco?
Es posible que en los países europeos, de clima frío y templado, no les sea muy familiar el coco. Sus palmeras son características de paisajes tropicales. No obstante, es uno de los productos alimenticios y cosméticos más utilizados hoy en día en todo el mundo.
Pero, ¿qué es realmente el coco? El coco es una fruta producida por una palmera llamada cocotero, cuyo nombre científico es “cocos nucifera”, originaria, presuntamente de las islas del pacífico. Sin embargo, hay quienes objetan esta presunción ya que se han encontrado fósiles de esta planta en Nueva Zelanda.
Clasificado por la botánica como una “drupa” (cáscara que internamente es carnosa), sus palmeras son capaces de producir cocos durante todo el año.
En el coco fruta propiedades son muchas.
La pulpa de esta fruta es utilizada no sólo como alimento en todos los países del mundo. También los subproductos del coco son utilizados en la cosmética y en la medicina. Y su concha fibrosa es aprovechada por la industria textil entre muchos otros usos.
En la gastronomía es aprovechada su pulpa y el agua que contiene en su interior tanto para dulcería como ingrediente en platos con diferentes carnes. Sus propiedades nutricionales han sido estudiadas por la ciencia alimentaria, considerándose como uno de los alimentos más completos.
Entre los productos derivados del coco fruto seco, además del agua cuyas propiedades se han comparado con el suero, también debemos mencionar su aceite, extraído de la pulpa, y que básicamente se trata de ácidos grasos saturados naturalmente.
Éste se aprovecha tanto en la alimentación como en la medicina y cosmética, donde es usado para detergentes, jabones de baño y en el cuidado de la piel, contra las arrugas y manchas. Igualmente en el cuidado del cabello y cuero cabelludo, contra la caspa y la alopecia.
Así mismo, el aceite de coco fruta Wikipedia se utiliza en la piel para evitar las estrías y para el crecimiento de las uñas. Tiene propiedades antibacterianas, es cicatrizante, desodorante, evita la irritación de la piel y blanquea los dientes.
Otro de los productos extraídos de esta fruta es la leche de coco que se saca de su pulpa moliéndola y enjuagándola en agua. Sus nutrientes son comparables a la leche de origen animal.
Más adelante, enumeraremos los nutrientes de estos sub-productos del coco.
¿Cuáles son los tipos de coco?
Dadas sus propiedades alimenticias, medicinales y cosmetológicas, el coco como fruta es un producto multifacético. Sin embargo, su aprovechamiento al máximo dependerá también del tipo de coco que utilicemos ya que existe cierta variedad.
Veamos, pues, cuáles son los tipos de coco existentes.
Los expertos los clasifican según su tamaño en cocos gigantes, cocos enanos y, su mezcla: los cocos híbridos.
Los primeros o gigantes, contienen mucha pulpa y mucha agua, por lo cual es mejor aprovechado por la industria de productos derivados. Dentro de esta clasificación, existe una gran variedad con sus propias características, cuyo nombre y sub-clase dependerá del sitio de origen.
En cuanto al coco enano, su contenido de agua es mucho menor y, quizás por ese motivo, la misma es mucho más dulce y concentrada que la del coco gigante, aunque su pulpa es considerada de menor calidad.
Por lo que respecta al coco híbrido, resulta ser un término medio entre los dos anteriores. Su agua y su carne son consideradas de excelente calidad.
En el mercado podemos encontrar las variedades conocidas popularmente como coco verde y coco marrón. Aclaramos que no se trata de variedades, en realidad tiene que ver con su grado de maduración y éste les da diferentes características en cuanto a pulpa y agua.
El coco verde nombre es mucho más abundante en agua, aunque ésta es poco dulce y sin sabor definido. Su carne, si bien es abundante, su consistencia es más “gomosa” y su concentración de grasas es menor, por lo que su sabor es menos notable.
En relación con el coco marrón, éste tendrá un contenido menor de agua, pero esta será muy dulce y de un sabor exquisito. Así mismo, su pulpa tendrá un contenido más alto de ácidos grasos, su consistencia será más sólida y su sabor más definido.
¿Dónde encontrar coco?
¿Estás interesado en consumir este excelente alimento y te estás preguntando dónde encontrar coco? Pues, siendo este uno de los frutos cuya producción se ha extendido por casi todo el planeta, no es difícil hallarlo en el mercado.
Se podría decir que todas las fruterías, tanto de ciudades tropicales como de climas templados, tienen existencia de coco, por lo cual no debería ser un problema adquirirlo.
En los países tropicales lo puedes encontrar incluso a lo largo de las carreteras que van de pueblo en pueblo, donde se vende como bebida refrescante: el encargado del negocio te pide que lo escojas, le abre unos agujeros y te lo da a beber con una pajilla.
Así mismo, si te encuentras en el trópico, visita una playa y verás los miles de cocoteros que adornan la orilla arenosa. Si puedes, baja un coco y disfruta de su agua y su pulpa al natural, mientras observas las olas en un atardecer de película.
Pero, si estás en un país templado o de clima frío, volvemos al comienzo: visita una frutería cercana a tu casa y compra un coco.
¿Es bueno comer coco a diario?
Antes de responder a la pregunta de si es bueno comer coco a diario o comer coco de noche, veamos cuáles son sus propiedades nutritivas y medicinales, así como algunas contraindicaciones.
Comencemos por las vitaminas y minerales que contiene:
Vitaminas del complejo B, como B1, B3, B5 y B6, importantísimas en el funcionamiento del cuerpo. Así mismo, contiene vitaminas C y E, ambas antioxidantes y estimulantes del sistema inmunológico.
En cuanto a los minerales, contiene:
Potasio, que favorece la acción de nuestros músculos y el impulso nervioso. Magnesio, que también favorece los músculos y además el funcionamiento del sistema digestivo, fortalece dientes y huesos y mejora las defensas del cuerpo. Y el fósforo que contribuye con el metabolismo.
Además, el coco también es rico en calcio, hierro y sodio. Unido a esto, su alta cantidad de fibra ayuda al movimiento intestinal y a la eliminación del colesterol.
Veamos por parte las propiedades de los productos obtenidos del coco.
El agua de coco, además de los contenidos vitamínicos ya mencionados en las líneas anteriores, contiene también zinc, yodo y selenio, así como enzimas, antioxidantes y aminoácidos. Además tiene electrolitos, lo que la hace beneficiosa para deportistas y para hipertensos.
Contiene muy poca grasa, pocos azúcares, pero es rica en hormonas vegetales que previenen y combaten el cáncer. Por otra parte, según los expertos, su composición es muy parecida al plasma sanguíneo, pudiendo ser utilizada como alternativa al suero.
La leche de coco, a su vez, no tiene casi nada que envidiar a la leche animal, de hecho es recomendada para aquellos que no toleran la lactosa. Se digiere más fácilmente debido a su tipo de grasa (ácidos grasos saturados naturales). Contiene las vitaminas del complejo B y los minerales antes mencionados.
Antioxidante, muy poco azúcar y rica en triglicéridos de la cadena media, que son los beneficiosos.
El aceite de coco, según sus defensores, favorece el sistema inmunológico, la tiroides, ayuda a perder peso, ayuda al buen funcionamiento cardiovascular y disminuye el colesterol.
Esto debido a los ya mencionados ácidos grasos que contiene. Ha sido recomendado para personas que sufren de diabetes, Alzheimer. Es anti-bacterial, antiviral y desparasitante intestinal.
Volviendo entonces a la pregunta inicial, si tomamos en cuenta todas estas propiedades del coco y sus derivados, llegaremos a la conclusión de que es un alimento excelente y que podría ser consumido a diario. Sin embargo, hay especialistas que no lo recomiendan así.
Al parecer, existen beneficios y perjuicios del coco. Estos especialistas se basan particularmente en el alto contenido de grasas y su valor energético, los cuales podrían contribuir a la obesidad.
Recomiendan, así mismo, no cocinar con aceite de coco ya que podría empeorar enfermedades cardiacas y es contraindicado para quienes padecen de problemas renales, debido al alto contenido de potasio y en algunos casos de alergia, podría generar ciertas reacciones.
Algunos aseguran que por el mismo alto contenido calórico y grasas, el coco engorda, sin embargo esto se equilibra por el también alto contenido de fibras.
Las opiniones respecto a este fruto varían de un especialista a otro. Por lo tanto, el consejo más saludable es: moderación y consultar a su médico de cabecera.
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